
Los fundamentos de la educación financiera
La educación financiera es el área de la educación económica que se ocupa de ayudarnos a gestionar nuestro dinero de la mejor manera posible y de forma eficiente. El crecimiento de la cultura financiera personal y colectiva de un país es crucial para aplicar políticas financieras eficaces y mejorar la calidad de vida de cada individuo. Con este artículo queremos intentar aumentar tus conocimientos básicos sobre la gestión de tus recursos financieros para que no te quedes desprevenido o desprevenida ante hipotéticos imprevistos y puedas así tomar decisiones financieras bien fundadas. En primer lugar, debemos preguntarnos:
¿Qué es la educación financiera?
Para encontrar una definición oficial de educación financiera, nos ayudan las organizaciones internacionales. Es una organización internacional como la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) la que nos da una importante definición de lo que es realmente la educación financiera:
«La educación financiera es el proceso mediante el cual los inversores mejoran su comprensión de los conceptos y productos financieros a través de la información, la educación y/o el asesoramiento, con el objetivo de desarrollar las habilidades y capacidades para ser más conscientes de los riesgos y las oportunidades financieras, para tomar decisiones más informadas, para saber dónde acudir en busca de ayuda y para tomar otras acciones eficaces para mejorar su bienestar financiero.»
Por lo tanto, a través de la educación financiera somos más conscientes de cómo gestionar nuestros activos y lo hacemos precisamente a través del conocimiento de lo que son:
- mercados financieros;
- operadores financieros;
- instrumentos financieros, productos, servicios de inversión;
- acciones, bonos, fondos de inversión, derivados;
- criptomonedas y sus mercados;
- cash flow.
El conocimiento de estos instrumentos, operadores, servicios y mercados es la base para entender, o más bien percibir, los riesgos financieros desde el principio. Es una base para reconocer posibles esquemas fraudulentos y elegir las oportunidades de inversión y/o ahorro más adecuadas.
Una vez que hayas adquirido estos conceptos, podrás trabajar de forma independiente y pasar a la acción. Por ejemplo, podrás:
Definir los objetivos: crear tu cartera financiera
En la gestión del dinero, como en otros ámbitos de la vida, es importante establecer objetivos financieros y patrimoniales y, sobre todo, intentar cumplirlos. Tienes que diseñar una estrategia que elimine las acciones potencialmente perjudiciales para tus finanzas, acciones que perjudican tus objetivos.
Para definir objetivos concretos, éstos deben coincidir con tu estilo de vida, tus actitudes y tus pasiones. De este modo, podrás entender desde el principio qué gastos pueden considerarse necesarios o, por el contrario, superfluos o innecesarios. Podrás responder a preguntas como, por ejemplo:
- ¿Necesito una tarjeta de crédito?
- ¿Qué cuenta corriente se adapta mejor a mis necesidades?
- ¿Es mejor vivir de alquiler o hipotecarse?
- ¿Cómo puedo crear un fondo de pensiones?
- ¿Sería útil estructurar un plan de acumulación de capital?
- ¿Puedo dedicar parte de mis inversiones a las criptomonedas?
Una vez que se hayan definido los objetivos, se podrá asignar concretamente la cartera y hacer realidad los objetivos teóricos. A continuación, definirás:
- gastos esenciales;
- gastos auxiliares;
- actividades secundarias: el porcentaje de tu cartera que se dedicará a las inversiones y también, por supuesto, el necesario para el ocio.
¿Cómo mejorar la propia cultura financiera?
Como hemos visto, el conocimiento de los conceptos e instrumentos financieros permite tomar decisiones informadas en todos los aspectos de la propia «vida» financiera. Hay libros dedicados a las finanzas, las inversiones, el cash flow, las criptomonedas, cursos online y presenciales con expertos del sector financiero.
La importancia de la educación financiera
Saber moverse dentro de las continuas evoluciones del mundo económico y financiero que envuelven nuestra vida cotidiana, nos permite vivir nuestra vida de una manera verdaderamente activa y consciente. Pensar en el dinero de acuerdo con los tiempos que corren es la forma más eficaz de realizar, paso a paso, la vida que quieres vivir, en armonía contigo mismo y con los demás.
Vivir una vida acorde con el bienestar interior, en armonía con los propios deseos y la existencia social, requiere también un correcto conocimiento de los actores, instrumentos y productos del mundo económico y financiero. Conocer la base financiera permite planificar mejor las estrategias de ahorro e inversión. Permite aumentar la disponibilidad económica y, en consecuencia, la calidad de vida. Las inseguridades, las angustias, las incertidumbres se superan a través del conocimiento y esto ocurre en todas las esferas de nuestra existencia y la económica y financiera no es una excepción. En este sentido, Dashero se esforzará siempre por garantizar que tengas el mejor conocimiento posible de la dinámica económica y financiera necesaria para tomar las riendas de tu vida.
